Historia del cacao

La historia del cacao

La historia del cacao empieza con los primeros habitantes de las zonas templadas de América, alrededor de los 20 grados al norte y sur de la franja del Ecuador geográfico, Algunos autores refieren que todo empezó en las zonas del amazonas sudamericano y así se fue expandiendo hasta el sur de México, aunque algunos refieren que fue al contrario, .

Los habitantes de estas zonas comían la fruta dulce de las vainas o las habas del cacao. Los árboles de cacao crecían en las selvas húmedas de Mesoamérica y servían de alimento, especialmente la pulpa blanquecina dulce, llamada “mucílago”, cuyas semillas ligeramente amargas no se consumían. Ese cacao era la variedad que hoy se le conoce como criollo que se caracteriza por ser el más puro y aromático.

La fabricación del chocolate se hacía como bebida ritual de poderes mágicos, mezclado con especias y chile, se usaba en ceremonias religiosas, como regalo a los dioses y en grandes banquetes o como alimento frío, y espumoso, para la aristocracia y era prohibido para las clases pobres, ya que era considerado un alimento de los dioses.

La historia del cacao

Al chocolate se le atribuían propiedades energéticas y saludables, lo cual hoy la ciencia demuestra como cierto. El origen del cacao, se remonta aproximadamente a 3700 años atrás en México, en donde se consumían los granos del cacao y se le conocía como “xocolatl”.

También se sabe que los habitantes prehispánicos. Mayas y aztecas en Mesoamérica lo utilizaban como moneda, incorporándolo también a su mitología. Se dice que los olmecas (1500 a.C – 400 a.C) fueron los primeros en conocer y utilizar las semillas de cacao.

Por su arte los toltecas (850 – 1100 d.C) aproximadamente descubrieron que la fermentación producida naturalmente en los frutos maduros, es la clave en el aroma, la intensidad y dulzura en las semillas. Sin embargo, los verdaderos protagonistas y cultores del cacao en todas sus formas fueron los mayas (3000, a.C – 1540 d.C) para todos ellos el cacao significaba mucho más que una semilla, siendo el regalo para los dioses y personas de la aristocracia, era parte de los rituales sagrados, las ceremonias religiosas, los grandes banquetes y era también utilizado como moneda.

Los mayas tenían un dios del cacao “Ek Chuah” mientras para los aztecas el dios del cacao era “Quetzalcoatl”. Se dice que las civilizaciones precolombinas bebían el cacao amargo, picante, con espuma y generalmente frío. Lo elaboraban a partir de semillas da cacao molidas sobre piedras y cocidas en agua, a las cuales les agregaban pimientos picantes y vainilla para dar sabor y harina de maíz para espesar.

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